Y vamos a segunda vuelta!

Lula nunca imaginó que los actos de corrupción en los cuales cercanos aliados han sido agarrados, literalmente, con las manos en la masa, tendrían alguna consecuencia. Pensó, en cambio, que lo anterior y su arrogancia al no comparecer al debate televisivo no afectarían sus pretensiones de salir electo en la primera vuelta.

El barbudo siempre se ha excusado diciendo que lo traicionaron, que no sabía nada y que no vió o escuchó nada, aún cuando en los sucesivos escándalos nada menos que su jefe de gabinete, presidentes y ex-presidentes del PT, amigos personales, asesores idem (que trabajaban en una oficina contígua a la suya) y hasta el encargado de preparar las suculentas carnes en las parrilladas presidenciales.

En mi opinión, aunque esté diciendo la verdad, no está calificado siquiera para ser presidente de una escuela de samba. Si no sabía nada, es un ignorante que se deja manipular, y si sabía, es un corrupto e incompetente.

Después del conteo de votos más rápido en la historia de las elecciones brasileñas (siete horas para contar casi 105 millones de votos), los resultados están ahí, segunda vuelta inesperada por la arrogancia izquierdista del PT:

Candidato Votos % de votos válidos
LULA 46.661.622 48,61
ALCKMIN 39.968.037 41,64

Lula, entonces, no pudo conseguir más votos válidos que sus adversarios sumados, por eso vamos a segunda vuelta.

Durante esta semana deben definirse las alianzas que ambos candidatos querrán hacer -o no- con Heloisa Helena (disidente del PT, izquierdista radical con poco más del 6% de los votos) y Cristovam Buarque (también disitente petista pero más al centro, que tuvo poco más del 2%).

Para terminar, informo que nuevamente la izquierda pierde en Venezuela cuando las elecciones no son organizadas por el CNE, al igual que en las elecciones peruanas y colombianas. Alckmin tuvo 53% de los votos en la embajada brasileña en Caracas, mientras que Lula se quedó con 38%. En Evolandia, Alckmin 55% y Lula 33%. En Cuba, claro, Lula 89% y Alckmin 4%.